Vacunación, clave para reactivar el turismo, señala estudio del IBD. La OMT señaló que el 2020 había sido el peor para el turismo internacional.El despliegue efectivo de la vacunación es una condición sine qua non para que las y los turistas retomen sus planes de viajar al retomar la confianza de que es seguro hacerlo, …
Vacunación, clave para reactivar el turismo, señala estudio del IBD
Vacunación, clave para reactivar el turismo, señala estudio del IBD. La OMT señaló que el 2020 había sido el peor para el turismo internacional.
El despliegue efectivo de la vacunación es una condición sine qua non para que las y los turistas retomen sus planes de viajar al retomar la confianza de que es seguro hacerlo, advierte un estudio publicado por la Dirección General de Análisis Legislativo del Instituto Belisario Domínguez (IBD) del Senado de la República.
El documento titulado “La reactivación del turismo después de la pandemia de Covid-19”, elaborado por el investigador Itzkuauhtli Benedicto Zamora Saenz apunta que, de acuerdo con expertos consultados por la Organización Mundial del Turismo (OMT), no sólo la inversión pública y privada es necesaria para reactivar la economía turística luego del colapso ocasionado por la pandemia, también es indispensable que México continúe avanzando en la campaña de vacunación en el país.
Refiere que, dado que el pronóstico de recuperación del turismo indica que será un proceso gradual y lento para retomar los niveles de la actividad que había previos a la pandemia, será muy importante que las ciudades que son altamente dependientes del turismo aprovechen esta coyuntura para diversificar su economía y para replantear su propia oferta turística de manera que estén en sintonía con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
En ese sentido, la reactivación turística que se está observando en actividades realizadas al aire libre como el ecoturismo y el turismo de montaña, constituye una oportunidad para que las comunidades rurales se vean beneficiadas económica y socialmente.
La investigación detalla que, de acuerdo con el INEGI, el turismo aporta 8.7% del Producto Interno Bruto total del país en valores corrientes y 5.8% de la población remunerada se ocupa en actividades relacionadas con el turismo tales como hotelería, transporte de pasajeros, restaurantes, bares y centros nocturnos.
Los conceptos turísticos que aportan más ingresos son los servicios de alojamiento (29.2% del total), los transportes de pasajeros (18.7%), restaurantes, bares y centros nocturnos (15.3%) y la producción de artesanías y otros bienes (11.4%).
En su introducción, Zamora Saenz señala que el turismo ha sido una de las actividades económicas de mayor crecimiento en las últimas décadas, al grado de constituir una de las principales fuentes de ingresos para varios países.
De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), antes de la pandemia de Covid-19, el Producto Interno Bruto Turístico (PIBT) representaba 10% del PIB total para la región latinoamericana y 26% para el Caribe.
A partir de las restricciones a la movilidad como una de las medidas sanitarias más empleada por los gobiernos para evitar la propagación del Covid-19, el turismo fue uno de los sectores de la economía más afectados, disminuyendo sensiblemente el nivel de actividad y el número de personas ocupadas en el sector.
De hecho, la OMT señaló que el año 2020 había sido el peor para el turismo internacional con una disminución de 74% en la llegada de viajeros internacionales y con severos efectos en los empleos directos e indirectos que genera esta actividad.